COSMOPOLITA.
“La gente me mira como un tipo de embajador o modelo a seguir. Es una gran responsabilidad. No puedo dejar que se me suba a la cabeza”.
fotos: Fuente externa
Su porte bien estilizado le ha merecido el título del “Marajá del Glamour”, un calificativo que le hace justicia por ser un joven muy atractivo, con un gusto ecléctico excepcional. Sin duda, es un ícono masculino de la moda. El buen vestir, para él, es ley. Su estilo único le ha dado el privilegio de posar junto a Giorgio Armani y desfilar para Dolce & Gabbana en la semana de la moda de Milán.
No es extraño verlo codeándose con personalidades de la jet set, como también de los royals ingleses, ya que mantiene una estrecho vínculo con algunos de ellos, por ser ahijado del príncipe Carlos de Inglaterra. Igualmente, se relaciona con los príncipes Guillermo y Harry.
“Le visito cada verano en su casa de Highgrove. El príncipe Carlos se interesa por la situación política de nuestro país y suele hacer preguntas. Todos mis cumpleaños me manda regalos: acuarelas pintadas por él, chocolate de Highgrove y libros que me recomienda”.
Pacho de Jaipur, cuyo nombre real es Sawai Padmanabah Sing, cuenta con una interesante y atípica historia de vida. Su madre, la princesa Diya Kumary, sorprendió a la realeza al informar que se iba a casar con un plebeyo, llamado Narendra Singh, hijo del jefe del personal de seguridad, al que conoció cuando llegó a trabajar a palacio. Esto de inmediato desató una gran polémica entre la aristocracia.
Pero lo que nadie se esperaba era que su abuelo, el monarca Sawai Man Singhji Bahadur, lo adoptaría en 2002, para convertirlo en su sucesor, cuando falleciera. El haber heredado el trono le supuso, además, ser dueño de una cuenta bancaria que asciende los 600 millones de euros.
A pesar de la distinción honorífica que ostenta, él no se perfila como una persona vanidosa, todo lo contrario: es muy humilde y generoso. Una de sus grandes pasiones de vida es el polo y ser un extraordinario jugador lo ha llevado a liderar la selección nacional de la India.
“Es una disciplina agotadora. Estoy siempre imaginando estrategias. Me encantaría que volviera la época de gloria del polo y ayudar a los niños talentosos que no tienen los recursos para aprender este deporte”.
Actualmente, estudia Historia del Arte en Roma, ciudad a la que considera su segunda favorita, después de su amada Jaipur. Es un trotamundos, le fascina viajar a diferentes partes del mundo y conocer diversas culturas e historias.
“No sé cómo será mi vida dentro de tres años, es demasiado pronto para pensar en formar una familia o en el rumbo que tomaré. Soy joven. Quiero acabar mis estudios y seguir promocionando Jaipur. Lo que sí sé es que, mientras pueda, seguiré jugando al polo y viajando”.
Con tan solo 21 años de edad, este millennial es catalogado como uno de los jóvenes más influyentes del mundo. Cabe destacar que figuró en la revista Forbes en su lista de los 30 menores de 30 años más poderosos del continente asiático. ¡Toda una joya!