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Carl Bernstein

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POR DENTRO.

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Carl Bernstein

¿Cómo ser un buen periodista?
El secreto para convertirse en un gran periodista es ser un buen oyente. En la mayoría de casos, los periodistas son muy malos oyentes.
Hay que dar a la gente la oportunidad de hablar y responder a las preguntas cuando se está investigando, y tener el objetivo claro de llegar a la verdad. Los temas éticos más importantes del periodismo son los más humanos. Un reportero tiene un enorme poder para lastimar a la gente, por lo que se debe ir con cuidado.
¿Cómo supo de la alianza secreta entre el papa Juan Pablo II y el presidente Ronald Reagan para acabar con el comunismo?
Estaba en Roma después de la caída del muro de Berlín. Asistí a una fiesta donde había muchos sacerdotes. Al conversar con uno de ellos, le comenté que, sin duda, los más beneficiados por este hecho eran ellos y la administración Reagan. Me miró con cierta suspicacia y contestó: “No sabe ni la mitad de la historia”. No quiso hablar más, pero presentí que acá había una noticia. Era evidente que los intereses de la Iglesia católica y los del gobierno estadounidense, en muchos casos, coincidían.
¿Qué lo sorprendió más del papa que lo llevó a escribir el libro “Su Santidad Juan Pablo II y la historia oculta de nuestro tiempo”?
Su misticismo. Rezaba de seis a ocho horas diarias arrodillado sobre ese frío piso de mármol de la basílica de San Pedro. Después del atentado en su contra, el 13 de mayo de 1981, llevó la bala que lo había herido a la Virgen de Fátima, la colocó en la estatua y le dio las gracias por haberle salvado la vida. Luego traería la estatua a Roma para rezar por la conversión de Rusia al cristianismo. Fue el 13 de mayo de 1917 cuando la Virgen dijo –en una aparición– que algún día Rusia se convertiría nuevamente. Fue uno de los hombres más extraordinarios del siglo XX, a la par de Churchill y Roosevelt.
Carl Bernstein ganó, con 30 años, el premio Pulitzer junto a su compañero Bob Woodward, al destapar, desde las páginas de The Washington Post, el escándalo Watergate, que terminó con la presidencia de Richard Nixon. Después de dejar Washington Post en 1976, desempeñó el cargo de jefe de la oficina de Washington y corresponsal de ABC News; enseñó en la Universidad de Nueva York y colaboró con la revista Time. Recibió recientemente el Premio Internacional de Periodismo Vanity Fair, en Madrid.