No han pasado 24 horas del bautizo del príncipe Louis de Cambridge, cuando la familia real británica ha vuelto a reunirse, esta vez para asistir a la celebración del centenario de la Royal Air Force, en la Abadía de Westmister, en Londres. La sorpresa en esta ocasión fue la aparición de Kate Middleton y el vestido de Meghan.
Solo hacen 11 semanas que Kate tuvo a su tercer hijo y aunque se encuentra de baja por maternidad, acudió al acto acompañada de su marido, el príncipe Guillermo de Inglaterra y sus cuñados, los duques de Sussex.
Meghan Markle y la nueva versión de su vestido de novia
Meghan, acudió al acto de homenaje de las fuerzas áreas reales con un espectacular vestido negro de corte A-Line, cuello tipo barco, el mismo modelo que utilizó en su vestido de novia en el mes de mayo.
El responsable de este hermoso vestido es la misma maison francesa Dior, diseñada en esta ocasión por Maria Grazia Chiuri, para completar el look agregó unos pendientes de Cartier y un sombrero de Stephen Jones, unos stilettos en tono crema para completar su impecable look.
La duquesa de Sussex entraba de brazo de su esposo, haciendo énfasis en la actitud amorosa que siempre les hemos visto, actitud que no reflejaban los duques de Cambridge.
Luego de este evento, los duques de Sussex parten hacía la República de Irlanda, a Dublin, cabe resaltar que este es el primer viaje internacional de los duques luego de su boda.
El look de su cuñada, Kate Middleton firmado por Alexander McQueen, nos deja claro su pasión por los diseños de este diseñador británico.
La reina Isabel II de Inglaterra no falto a este compromiso, a pesar de que fue la gran ausente en el bautizo de su bisnieto. La soberana se mostró alegre esta mañana durante el oficio religioso.
